La capacidad de SORPRENDER
(Experimentar una alteración emocional cuando una cosa no está prevista o no se espera).
Todos somos conscientes que la velocidad de la información es directamente proporcional a nuestra capacidad de sorprendernos con aquello que desconocemos, ya que cada día conocemos más y más.
Ahora bien, SORPRENDER es muy sencillo, aunque pudiera parecer muy difícil, puesto que nos sorprende todo aquello que no esperamos. Nos genera sorpresa, la cual lógicamente, puede ser positiva o negativa.
Hoy hablaremos de cómo generar sorpresas positivas a nuestros clientes y de las consecuencias que ésta genera en nuestro negocio.
Si yo pido un café y usted me pone una galletita, me sorprenderá gratamente.
Si yo llevo mi vehículo al taller para cambiar el aceite y usted me lo devuelve limpio, me sorprenderá gratamente.
Si usted tiene un lugar para que mis hijos pinten mientras estoy en la peluquería, me sorprenderá gratamente.
Si usted me da algo que no espero por muy pequeño que sea, me sorprenderá gratamente.
Y si usted consigue que recupere una sensación olvidada, eso me sorprenderá gratamente.
¿Qué ganamos sorprendiendo a nuestros clientes? Si consigues el efecto de una agradable sorpresa, conseguirás dos efectos extremadamente beneficiosos para tu empresa, uno la fidelización y el otro la prescripción.
¿Qué es mejor, regalar una docena de rosas al año o todos los meses una? ¿Qué piensas que produce más efecto? Tienes que convertir el arte de sorprender en una cosa ordinaria, pues cuando no lo hagas, todo el mundo estará esperando.
Cambia, combina, modifica y crea nuevas sorpresas para tus clientes y verás como tu negocio, servicio o producto, estará posicionado positivamente en sus tendencias de consumo.
Lo importante es que a mayor frecuencia, mayor es el hábito, y el hábito te llevará a ser un especialista en el arte de sorprender y todos estarán esperando que los SORPRENDAS GRATAMENTE,
¿SORPRENDIDO?
Miguel Alemany